El Barroco es un juego de luces y sombras, de tensión y armonía. Contrapunto es la materialización de esa esencia: un borcego que mezcla texturas, brillos metálicos y un aire de rebeldía sofisticada. Las hebillas y su estructura imponente recuerdan la teatralidad barroca, donde cada detalle cuenta una historia de opulencia y movimiento. Este modelo no se queda quieto, e sun paso firme en medio de la penumbra, un contraste entre la fuerza y la delicadeza, el pasado, presente y futuro.