Hay un zapato que no solo camina calles, sino que escribe historias. El Notinham no teme a las miradas, porque sabe que cada paso suyo deja huella. Nacido de un contraste perfecto entre el negro y el bordó, sus detalles en charol y costuras de diseño son un guiño a quienes entienden que estilo y comodidad no están peleados.